
En cada esquina hay un cartel que lo anuncia:
“He perdido unas bragas. Recompensa para quien las encuentre.”
Atraído por recompensa salí a la calle a buscarlas. En cada cuerda buscaba, en cada tienda miraba incluso en los parques ojeaba. Ahora ando deambulando por la ciudad si rumbo fijo y bajo el agua de lluvia busco tus pisadas que me lleven bajo tu falda.